Kevin Garnett logró 24 puntos y nueve rebotes y Rajon Rondo obtuvo 18 puntos y 15 asistencias para los Celtics, que han ganado 33 encuentros y perdido 24 y que están a dos victorias de la tercera posición de la Conferencia Este.
Boston ha llegado a las finales de la NBA en dos de las últimas cuatro temporadas, pero con una plantilla envejecida pocos lo consideraban un aspirante al título.
"Hemos estado en un segundo plano durante todo el año, ésta es nuestra oportunidad de mostrarle al mundo que aún tenemos mucho que hacer", dijo a la prensa Paul Pierce después de ser el máximo anotador del equipo con 27 puntos.
"Es un momento divertido del año, los 'playoff' están a la vuelta de la esquina y nosotros tenemos éxito en esas situaciones".
LeBron James anotó 36 puntos, siete rebotes y siete asistencias para Miami, mientras que Dwyane Wade aportó 20, pero los Heat, que han ganado 40 encuentros y perdido 16, cayeron a dos victorias y media por detrás del líder Chicago tras sufrir su segunda derrota en casa en tres partidos.
Miami había tenido anteriormente una racha de 17 victorias consecutivas en casa.
Los Heat, que perdieron por 19 puntos ante los Celtics la semana pasada, se quedaron 11 puntos por detrás en el primer cuarto y nunca recuperaron ese déficit.
Boston aumentó la ventaja a 18 tantos en un momento del segundo cuarto antes de que el equipo local luchara para recortar esa ventaja a ocho puntos en el descanso.
Miami trató de hacer un último esfuerzo en el último cuarto donde recortaron el déficit y se colocaron 108-103 a falta de 2,21 minutos para el final, pero los Celtics respondieron para asegurarse el partido.
Boston anotó el 60 por ciento de los tiros de campo y Rondo logró dobles dígitos en las asistencias por decimoctava vez consecutiva, la racha más larga desde que John Stockton lo hiciera en 29 partidos en 1992.
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